¡Ah, la ironía!, Sean Kenney, un hombre tan atractivo que una vez fue la cara de los cigarrillos Winston, se hizo famoso bajo una gruesa capa de maquilla como el desfigurado, mudo y envejecido Capitán Christopher Pike, pero es un papel que le ha asegurado la inmortalidad en la cultura pop.
Entrevista de Ian Spelling
Kenney sonríe ante la situación. Como hombre que todavía conserva un aspecto atractivo al tiempo que se acerca a los setenta años, se encuentra en mucha mejor forma que el Pike que interpreto en
«The Menagerie, Parte1» y «Parte 2,» la sombra de un hombre relegado a una silla de ruedas futurista y que solo podía comunicarse mediante el parpadeo de una luz.
Además de su breve retorno como el Teniente DePaul en «Arena» y en «A Taste of Armageddon,» el trabajo de Kenney en Star Trek le aseguro un lugar en el vagón de las convenciones que le ha asegurado unos dividendos años luz más allá de lo que él hubiera conseguido interpretando a Pike. Continuar leyendo