Como antiguo oficial cientitifico y ahora capitán de una nave científica, Ronald Arens ha encontrado una gran cantidad de interesantes fenómenos estelares: un agujero negro o un extraño quasar, estrellas a punto de convertirse en novas, una nebulosa de vez en cuando, aquí y allí. Incluso había pasado dos semanas estudiando un pulsar nomada. Nada de lo que Arens ha visto con sus propios ojos o leído en los informes presentados por los que observan incluso las más extrañas singularidades espaciales tiene comparación con la que ahora aparecia en la pantalla principal del puente del USS Huang Zhong.
«Está bien», dijo Arens, levantándose de su silla de mando y acercándose a la pantalla,»Creo que esto califica como impresionante la acogida al sistema de Kondaii,especialmente teniendo en cuenta la forma en que casi hacemos volar por los aire los motores tratando de llegar hasta aquí.»
Construido para correr, el Huang Zhong, una nave exploradora de Clase Archer configurada para llevar una paleta mejorada de redes de sensores y otros equipos relacionados con la recopilación de datos cientifcos había llegado hasta allí con la máxima velocidad después de su abrupta reconversión a nave de patrulla. A pesar de su comentario, la pequeña nave era de confianza había aguantado fácilmente el esfuerzo de viajar a altas velocidades de curvatura durante casi una semana.
En cuanto a por qué les habian enviado alli, el capitán había dicho que la nave asignada originalmente, el USS Lexington, había sido enviado a otra parte para una tarea de mayor prioridad. Aunque la tripulación de su nave cientifica estuviera en un apuro, Arens sabía que no podía competir con una nave de la clase Constitución. Por ello el Enterprise había sido desviado al sistema Kondaii a asumir el peso y las tareas de investigación. Hasta entonces, era el espectáculo del Zhong Huang.
Fuente Trekweb
Traducción Miguel